diumenge, 14 d’octubre del 2012

Navegando en la arena


     Mucho más lento que en situaciones más fáciles, pero todo paso avanzado en medio del desierto es fruto de una lucha que nos hace más fuertes. Todo aquel que sirve a Dios, atraviesa tiempos de desierto. Pero en el silencio de la oscura noche del desierto, la voz de Dios debe escucharse profundamente y el destello de una zarza ardiendo, debe llamar nuestra atención.     ¡Dios ayúdanos a convertir nuestros desiertos en tiempos de aprendizaje, 
para volver, como Moisés, con un interior más a Tu Estilo!.